PAN y PRD van por el Estado de México

Antes de continuar con las fiestas por los triunfos alcanzados el pasado domingo 5, los dirigentes del Partido Acción Nacional y del Partido de la Revolución Democrática deberían ser tan sensatos como el colombiano Juan Carlos Osorio, director técnico de la Selección Mexicana de Fútbol, poniendo los pies en la tierra y valorar lo obtenido y entender serenamente que para coronar sus deseos tendrán un largo, sinuoso y complicado camino que recorrer.
Ricardo Anaya Cortés está viviendo momentos inesperados y habla mucho sin meditar. El PAN conquista, solo, dos gubernaturas y las cinco en alianza con el PRD. Es la primera vez que los albiazules tendrán gobernadores en once Estados. En 1989 abrieron caminito al ganar Baja California con Ernesto Ruffo Appel y en 1991 Carlos Salinas de Gortari determinó entregar la gubernatura de Guanajuato al PAN en la persona de Carlos Medina Plascencia, pese a que el candidato del PRI ganó en las urnas. Ambas entidades no se han vuelto a vestir con los colores del tricolor.
Antes de los comicios de este mes, en Baja California Sur el PAN desplazó al PRD y Querétaro nuevamente está en sus manos. Hoy se suman por triunfos, sin ligarse con otros grupos o partidos: en Aguascalientes por primera vez y en Chihuahua, donde hace 24 años gobernaba el panista Francisco Barrio Terrazas. Con los votos del Sol Azteca ahora tienen Quintana Roo, Veracruz y Durango. En Puebla refrendaron la victoria con el apoyo del expriista Rafael Moreno Valle Rosas que ansía ser el candidato presidencial dentro de dos años.
Anaya Cortés está en plena campaña, porque él quiere ser el abanderado de la derecha en las elecciones del 2018. Tiene como principal rival al poblano que dejara de ser gobernador. La señora Margarita Zavala Gómez del Campo también continúa en la búsqueda de contar con el apoyo mayoritario en el partido, donde su esposo fue presidente nacional. El joven mexiquense-queretano es reconocido por llevar al PAN a las alturas que nunca imaginaron, solo que tiene en su contra el ser demasiado frívolo.
Pero, el pero que nunca falta, tanto los panistas como los perredistas deben adoptar una postura más realista. Los electores en el 2000 se fueron a favor de Vicente Fox, porque estaban cansados de los triunfos priistas y un pleito interno en el PRI favoreció en el 2006 a Felipe Calderón. Ninguno de los dos sexenios llamados de la alternancia, cambiaron la situación de los mexicanos; es decir, no se resolvieron los principales problema, se incrementó la corrupción, hubo impunidad en todo el país para los funcionarios.
En las elecciones del año pasado fue muy claro el rechazo, el repudio, hacia la partidocracia. La gente no solo estaba de mal humor, estaba verdaderamente indignada. En Nuevo León los electores determinaron romper con los partidos y le dieron el voto a un expriista que se etiquetó el mote de independiente. En Morelia tienen un presidente municipal ’independiente’ y en la Legislatura de Jalisco, un joven de nombre Pedro Kumamoto es diputado independiente de verdad.
Pues en medio de toda la euforia que tiene esa rara mezcla del agua y el aceite, es decir la llamada izquierda jugando de comparsa con la denominada derecha, ya no hay principios, borraron el aspecto ideológico. PAN y PRD se quedaron con la joya de la corona, Veracruz, y ahora veremos cómo gobierna el Yunes que tiene una larga cola que le pisen, después de salir del PRI, de cobijarse con la profesora Elba Esther Gordillo y traicionarla. Se anuncia una ola de venganzas de parte de Miguel Ángel, cuyo paso en la dirección del ISSSTE es de los más corruptos.
Ahora se habla en ambos partidos de seguir como mancuerna contra el PRI, pretendiendo desterrarlo del Estado de México, cuyo padrón electoral es el número uno en el país, Veracruz el segundo y el tercero lo es la Ciudad de México, donde López Obrador se mantiene con buen número de seguidores. Ya el mexiquense Enrique Peña Nieto lleva dos derrotas electorales seguidas, pero sería muy grave que también perdiera, como Presidente de la República y primer priista del país, la gubernatura de su Estado.
PREGUNTA PARA MEDITAR:
¿Hasta cuándo y hasta dónde podrá seguir el matrimonio de los azules con los amarillos, firmarán por bienes mancomunados o decidirán hacerlo mediante intereses por separado?
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